BBC Mundo le preguntó al director de Migración de Panamá si el presidente Mulino cumplirá en 2025 su promesa de cerrar por completo el paso a migrantes irregulares por el Darién.

“Cuando el presidente habló de cerrar la frontera, obviamente lo hizo en sentido figurado, porque es una selva. Ni poniendo un muro podemos, de repente, cerrar taxativamente la frontera”, respondió.

Por el momento, indicó, las autoridades panameñas proyectan reforzar el patrullaje en la selva y negocian con Estados Unidos el aporte de más fondos para ampliar el programa de retorno voluntario, deportaciones y expulsiones.

“Ojalá el tránsito llegara a cero, pero la verdad es que eso va a depender de agentes externos o de situaciones sobre las que Panamá como tal no tiene un efecto directo”, sentenció.